Hace algunos días tuvimos en la oficina de UTpCh, en Infocap, la visita de Mariano Puga con el que pudimos conversar acerca de las comunidades que comienzan a reunirse en 15 campamentos de la región metropolitana.
El ha sido sacerdote obrero (pintor), y ha trabajado como párroco en Pudahuel, Villa Francia, y La Legua. donde ha sido un entusiasta participante en comunidades de base. Actualmente vive y trabaja en Chiloé.
Ante la pregunta que le hicimos acerca de cual era su ideal de sociedad, tomó la Biblia, la abrió en los Hechos de los Apóstoles (Hechos 2, 42 - 47), y leyó:
Todos se congregaban para escuchar las enseñanzas de los apóstoles, permanecer en comunión los unos con los otros, participar en la fracción del pan y perseverar unánimes en la oración. Un profundo temor reverencial dominaba a todos cuantos veían los muchos milagros y prodigios que hacían los apóstoles.
Además, los creyentes se reunían asiduamente; permanecían juntos y tenían todas las cosas en común. Vendían sus propiedades y sus bienes, y distribuían el producto de las ventas conforme a las necesidades de cada cual. Diariamente acudían al templo, partían el pan en las casas y comían juntos con gran alegría y sinceridad de corazón.
Así, estrechamente unidos por la fe, alababan a Dios y eran tenidos en gran estima por la gente de la ciudad; y cada día añadía el Señor a la comunidad a los que estaban en camino de salvación.
